martes, 10 de junio de 2014

CONTRA EL SOCIALISMO AGAZAPADO DEL PALACIO DE NARIÑO


Lo del próximo domingo en las urnas, no será simplemente la elección del presidente número 60 de nuestra poco celebre historia republicana; no, de forma agazapada, será la elección en la cual se definirá el futuro modelo ideológico y económico que regirá las relaciones sociales y mercantiles entre los habitantes de la nación, decisión trascendental ensombrecida por la irresponsable polarización entre guerra y paz en la que simplificaron este debate electoral.

Las nuevas bases sobre las que descansa la campaña reeleccionista nos permiten percibir la tendencia socialista del camaleónico huésped del Palacio de Nariño, quien ya aseguro su estampa en la historia criolla, como aquel personaje que sin siquiera sonrojarse fue elegido por la derecha, gobernó como la centro-izquierda y posiblemente es reelegido (dios no quiera) por la izquierda recalcitrante y subversiva, muestra indiscutible de la “dinámica” putrefacta de la política nacional y de los efectos adictivos del presupuesto público convertido en mermelada.

Propuestas de desprivatización y desmercantilizacion de la economía expuestas desde la Habana por los asesores políticos del gobierno; la incorporación de guerrilleros a las filas de nuestro ejército, de la mano con la exigencia de una nueva doctrina militar propuesta por el erudito omnisapiente alcalde de la cada vez más caótica y destruida capital; la exigencia de virar la ideología de la junta directiva del Banco de la Republica desplegada por Clara López enemiga publica del libre mercado; y la utilización de la Fiscalía General de la Nación como lacayo al servicio de intenciones electorales, son apenas la punta del iceberg de lo que le espera a Colombia, país en el que sus habitantes se niegan a revisar las nefastas experiencias de su vecino más cercano en el cual, gracias al socialismo, el papel higiénico se convirtió en un producto suntuoso y la actividad con él desarrollada placer de unos pocos.

Ojo, no lo olvidemos, el socialismo es la filosofía del fracaso. El credo de la ignorancia, la predica de la envidia, y su virtud inherente, es la distribución igualitaria de la miseria[1], es el modelo de gobierno de los ególatras acomplejados con insaciable codicia de poder, cuyos contradictores corren la suerte de convertirse en el blanco predilecto de retaliaciones políticas mediante la utilización de órganos públicos permeados, sumisos y de bolsillo, y en el cual pensar diferente al gobierno es un pecado capital.

Así las cosas, este domingo los invito a votar, no solamente contra el socialismo que nos pretenden imponer, sino también contra la falta de coherencia e ideología política de la “unidad nacional” desvanecida por la mermelada, contra el sectarismo aniquilador de unos pocos, contra el “gamín” de Vargas Lleras, contra Petro, Piedad, Clara López, Iván Cepeda y las FARC y sobre todo votemos contra la risa sarcástica y prepotente del incompetente camaleón huésped del Palacio de Nariño.




[1] Winston Churchill

martes, 27 de mayo de 2014

LO PEOR ESTÁ POR VERSE


Lo sucedido el pasado domingo con Juan Manuel Santos y su sequito de aduladores, autodenominados “unidad nacional” es bochornoso, pues a pesar de haber concentrado todo el andamiaje estatal a una personal intención electoral y embadurnar de mermelada las administraciones municipales a lo largo y ancho del país, no logro que su coqueta mirada, en algunas ocasiones depilada en exceso, sedujera a la mayoría de los electores. Ni siquiera las alianzas clientelistas, con las que de forma sutil pretendió resquebrajar partidos políticos como el Conservador o la Alianza verde, le valieron para vencer al candidato del que otrora pavoneaba como su mentor y del que hoy se jacta de enfrentar por lo nefasto que fue para el país. Los anaqueles de la historia ya cuentan con un lugar especial para el presidente que sumado a lo anterior, convirtió los medios de comunicación sin excepción, en jefaturas de prensa alternas de la campaña reeleccionista; y que a pesar de contar con todo a su favor no logro salir victorioso apabullantemente de la primera batalla electoral, sino por el contrario ocupar un deshonroso segundo lugar.

Sin embargo, y tal vez obnubilado por la coba de las rémoras que le siguen, el presidente no se percató de la falta de identidad entre el país en el que vive la “unidad nacional” y el país en el que vivimos los más de 9 millones de colombianos que no votamos por él; prueba de ello fue su discurso de aceptación de la derrota, carente por cierto de profundidad y altura, en el cual estímulo a mas no poder la polarización funesta a la que irresponsablemente nos conduce, guerra y paz, esperanza y miedo, pluralismo y unanimidad y entre un supuesto Estado de derecho y el todo vale; simplificando en exceso el debate presidencial y restándole importancia a la disputa en la que se encuentra.

Estas semanas, para los que disfrutamos de la política será supremamente aburrida y desestimulante. La búsqueda inescrupulosa de votos; las emisiones de los noticieros hasta en las secciones de farándula pretendiendo explicar los que el candidato presidente, con su problema de tartamudez, no puede; el expresidente Gaviria energumen@ gritando en la plaza pública ¡¡¡Uribe mentiroso¡¡¡; bacata dando catedra de humildad y democracia; la cabeza más brillante y calva del país hurgando hasta las basuras en la búsqueda de imputaciones que eliminen de tajo competidores; recursos del erario público despilfarrados en el multicolor ajuar reeleccionista…en fin, nos espera un debate presidencial de altura.

No puedo dejar de lado la parte decente de estas elecciones, mucho menos arregladas y maquilladas – y ligeramente más femeninas- que nuestro candidato-presidente, las vencedoras de la jornada; Marta Lucia Ramírez del Partido Conservador, quien a pesar de recibir los embates permanentes de la mermelada estatal y el sectarismo aniquilador de algunos expresidentes, logro conquistar las bases de un histórico partido que se niega a desaparecer. Y Clara López del Polo Democrático, representando la verdadera izquierda nacional. Estos partidos demostraron, ajenos a caudillismos vanidosos y ególatras, que las propuestas estructuradas y programáticas y las ideologías responsables, si encuentran receptividad en un desinflado electorado hastiado de las prácticas putrefactas de la política actual.    


martes, 20 de mayo de 2014

LA BOCHORNOSA Y MEDIOCRE CAMPAÑA PRESIDENCIAL


En los últimos días, azuzados por la mediocridad en la que ha degenerado el periodismo criollo convertido en armas de destrucción de honorabilidad y en cajas de resonancia de chismes de peluquería y cocina, la campaña electoral a la presidencia de la república ha llegado al nivel más bajo permitido, carente desde todo punto de vista de la altura y preparación que demanda el cargo en disputa. Enfrentamientos en los que ideologías, opiniones y propuestas brillan por su ausencia, opacadas por los señalamientos personales y hasta familiares producto de averiguaciones malsanas, se convirtieron sin darnos cuenta en los pilares que soportan nuestro debate electoral.

Triste y dolorosa campaña la que vivimos, caracterizada por la ausencia de estadistas e ideologías políticas claras; polarizaciones irreconciliables entre guerra y paz, alimentadas por la codicia electoral; alianzas entre caudillos carentes de coherencia política que carcomen permanentemente los partidos políticos, componente fundamental de una democracia; falta de propuestas reales que propendan por la seducción de un electorado más preocupado por el desenlace de la telenovela de turno que por los destinos del país; y el rescate del baúl del olvido de expresidentes inservibles que en su momento nada hicieron y que ahora fungen como energúmen@s oradores; serán los únicos resultados de una campaña mediática y mediocre, herencia nefasta de esta politiquera generación miope, excitada por la ambición de poder y deslumbrada por la lamboneria de los más renombrados “periodistas”.

Esta situación, que abona cada vez más nuestro tránsito hacia la desinstitucionalización generalizada y una anarquía galopante, acontece ante la aquiescencia irresponsable de los medios de comunicación, manipuladores y parcializados, obnubilados por el amarillismo propio de las desfachateces que suministran permanentemente las jefaturas de prensa de las campañas que les patrocina y que se prostituyen al mejor postor para colmar su insaciable apetito de reconocimiento y lucro.

Flaco favor el que le hacen a la democracia y a la historia del país la prensa escrita y los noticieros de radio y televisión, al mutar su función de informadores a la de chismosos y especuladores (y en muchos casos extorsionistas), tomando partido hacia las candidaturas que más les favorezcan y desdibujando aquellas que de forma responsable presentan propuestas estructurales y no quieren caer en el bochornoso espectáculo matutino de las diatribas personales.


¡¡¡Ni santistas ni uribistas…queremos periodistas¡¡¡

martes, 13 de mayo de 2014

LA BRILLANTE Y TOTALITARIA CALVA DEL FISCAL MONTEALEGRE


Como si no fueran suficientes las constantes intervenciones de evidente tenor político del Fiscal General de la Nación, ajenas en su totalidad a la naturaleza jurídica del cargo que ejerce, demostrando su servil posición a quienes tras bambalinas lo manipulan; con preocupación leí, a propósito del escándalo del hacker Andrés Sepúlveda, lo que tal vez es la estocada final a nuestro maltrecho y manoseado principio de legalidad, escudo protector de los habitantes de a pie ante el ejercicio del poder público.

Al ser cuestionado del por qué le llamaba la atención la posición de derecha de Sepúlveda, descaradamente el fiscal contesta, al mejor estilo Chavista: “…El hacker es un neofascista sobre el cual el país tiene que abrir los ojos. Estamos viendo muy peligrosamente el surgimiento de grupos neofascistas”. No contento con tal nefasto pronunciamiento cargado de ideología y parcialidad, y con el cual elimino por completo la imparcialidad de la diosa de la justicia, le preguntan ¿“La guerra sucia que usted denuncia es de quién contra quién?”, a lo cual contundentemente responde: “De la ultraderecha colombiana contra una solución negociada al conflicto”.

Sin profundizar en disquisiciones y debates magistrales sobre lo que ha sido en la historia de la humanidad las ideologías extremas (sobre todo en Alemania e Italia), de forma somera debemos entender que tanto el nazismo, el fascismo o la ultraderecha son meras posturas ideológicas y políticas, que per se no pueden catalogarse como delitos, no pueden judicializarse y mucho menos se puede satanizar a quienes expresen simpatía por las mismas; toda vez que el gran pecado de estas no es su existencia, sino que degeneren en la comisión de delitos, actuaciones que si pondrían en marcha el engranaje judicial. Sin embargo, flaco favor le hace a Colombia las declaraciones de la “cabeza más brillante del país” - literalmente hablando -, tirando al traste al mejor estilo venezolano, la posibilidad de pensar diferente, la posibilidad de criticar lo que no compartimos y ejercer en debida forma las garantías que trae consigo los límites al ejercicio del poder público expresadas mediante el principio de legalidad.

Pasar por alto estas pendencieras declaraciones, como desafortunadamente lo hacen los enmermelados medios de comunicación, de la mano con la fragilidad del sistema electoral criollo, manoseable permanentemente por su amante de turno; una rama judicial que deambula no con túnica sino con harapos corroídos por la politiquería; y una política polarizada en extremos irreconciliables consecuencia de intereses electorales; abonan el terreno y abren de par en par la puerta al totalitarismo ideológico tan criticado por los socialistas del siglo XXI, al cual se matriculo con lujo de detalles la brillante calva del señor Montealegre.  



martes, 6 de mayo de 2014

COMPROMISO CUMPLIDO


En diciembre del año 2010 desde las ruinas del municipio de Gramalote (Norte de Santander) aun fumantes por el vapor de sus entrañas y húmedas por las interminables lágrimas de sus habitantes, el mismo Juan Manuel Santos de la mejor manera presagio lo que su gobierno procuraba para el país:

“Vamos a escoger a Gramalote como un ejemplo de lo que vamos a hacer con este país…”

Recorrer hoy el casco urbano de ese devastado municipio, casi cuatro años después de la tragedia, para los que tuvimos la fortuna de conocerlo con anterioridad, evidencia que esta promesa, es tal vez, la única de las que el gobierno cumplió a cabalidad durante este nefasto mandato.

Transitar por aquel municipio cafetero nos permite observar la desesperanza e incredulidad en sus habitantes; la tristeza de los vecinos que se niegan a abandonar su terruño hacinados en albergues cuya temporalidad se diluyo con el pasar de los días; las ruinas opacadas por la naturaleza que se abre paso por los caminos del abandono; todo ante la mirada atónita de una administración embelesada por la mermelada corruptora del presupuesto público disfrazada de inversión. Estos simples ejemplos nos permiten asegurarle un parte de victoria al vanidoso ejecutivo, pues no en vano esos mismos sentimientos que emergen a flor de piel en los gramaloteros, son el común denominador en el grueso de la población colombiana.

No en vano la desilusión y desconfianza en la institución de la presidencia de la república, entregada al garete de la coyuntura diaria que vociferan los amarillistas medios de comunicación, manifestando claramente la carencia de planeación en sus políticas y su excluyente intención electoral; un legislativo cada vez más distante de los intereses de sus votantes, enceguecidos por la mermelada putrefacta de palacio; y una rama judicial cochina y permeada en su totalidad por la ambición y politiquería del sanedrín presidencial; dan como resultado concluir que el gobierno si le cumplió a Gramalote, porque sus escombros abandonados son la más fiel evidencia de lo que es hoy el país, dirigido por la incompetencia e ineptitud de una administración pública petulante, individualista y narcisista. 

 “Gramalotizar” el país, era la única promesa que Juan Manuel Santos no debía cumplir, sin embargo y contra todo pronóstico lo hizo, nos entregara un país en ruinas, polarizado, sin esperanzas y humillado, en el cual cada vez más, como en aquel municipio, la anarquía matricula más adeptos ante su complacencia irresponsable.   

martes, 29 de abril de 2014

EL VENTILADOR DE LA PICOTA


Enquistada en las tertulias que se desarrollan en la ciudad, desde el antiguamente celebre y exclusivo campo de golf hasta la más humilde tienda de los asentamientos ilegales, ha emergido las posibles salpicaduras del “ventilador” que desde la picota encendería el funestamente famoso exalcalde de Cúcuta. Evidencia importante que nos permite deducir que sus tentáculos no solo se limitaron a permear las esferas del poder, sino que se pavoneó entre los más representativos sectores de la sociedad local, obnubilada por el signo pesos que brotaba de sus campechanas intervenciones.

Increíblemente triste que los tentáculos de un condenado continúen generando replicas en la vida local; increíblemente triste que aún se construyan alianzas políticas en torno suyo y continúe siendo el prohombre que maneja (junto a sus secuaces) los hilos invisibles del poder; increíblemente triste que a pesar del daño que le hizo a la ciudad, pretenda con el individualismo característico de los reos, enlodar aún más la ya marchita y sucia política regional; pasándola de los debates y las propuestas que conquistan electores, a los estrados judiciales utilizados ahora como herramientas que procuran la eliminación del adversario con la amenaza latente de ocupar un lugar en algún pabellón penitenciario, por que como se conoce en el argot popular, actualmente una medida de aseguramiento no se le niega a nadie.

En un acto de contrición para con la ciudad que le dio todo, no solo a usted sino a sus generaciones venideras, encienda ese ventilador inquisitivo, pero enciéndalo sin limitación alguna, permítanos conocer quienes prefirieron su lucro personal y su insaciable apetito de poder al interés y el desarrollo de la ciudad; no simplemente utilice su brisa maligna para enlodar unos pocos y fortalecer a sus coequiperos de turno, pues frustrante favor le haría a la noble, leal y valerosa, entregándola a merced de una clase dirigente ambiciosa y agazapada temerosa de enfrentar a sus contrarios con los instrumentos democráticos existentes.


Puede ser, que consecuencia de la redacción de estas líneas este servidor pase a ser parte activa de incriminaciones artificiales, a pesar que para la época de los hechos fungía como un humilde provinciano estudiante en tierras capitalinas, sin embargo ya está bueno de guardar silencio y prudencia, es hora de tomar partido y expresar a viva voz que en la ciudad… ¡¡¡NO TODO VALE¡¡¡

viernes, 25 de abril de 2014

¿Y DÓNDE ESTÁ EL ABOGADO?


Risible, indignante y avergonzaste resulta en mi condición de abogado la majestuosa actuación jurídica de nuestro ególatra y depilado presidente, a propósito del anuncio de la impugnación del fallo de tutela que le ordeno dejar sin efectos el decreto de destitución del Hugo Chávez criollo, el “demócrata” Gustavo Petro.

En primer lugar, quisiera iniciar por releer y restudiar la definición de impugnación, y recuerdo que en los helados recintos del Externado, enquistado en las montañas capitalinas, nos enseñaban que la misma hace referencia a la intención de combatir, contradecir o refutar una decisión judicial que el impugnante no comparte, con la intención de que la misma sea revisada por el superior jerárquico del que la emite y de esta forma pretender que se modifique, confirme o revoque, ¡¡¡antes de cumplirla¡¡¡.

Así las cosas, no le veo el menor asomo de coherencia jurídica al anuncio del gobierno de impugnar lo que dócilmente ya cumplió. Por el contrario, el desbarajuste que se avecina por esta irresponsabilidad es de protuberantes dimensiones, pues fácilmente en un par de días, y como es costumbre, veremos a nuestro narciso presidente con el rabo entre las piernas reculando, bajo el argumento de ser un estadista arraigado a las disposiciones legales y judiciales, y nuevamente Petro, su sequito socialista y su mascota Bacata a la plaza de central de la cada vez más caótica capital colombiana.

Por otro lado, no quisiera dejar de lado la inconsistencia que tampoco percataron los eruditos juristas de palacio, consistente en que los fallos de tutela NO pueden dejar sin efectos actos administrativos, competencia que descansa exclusivamente en la máxima corte de lo contencioso administrativo (Consejo de Estado); lo que sí puede un juez de tutela es ordenar la inaplicación de las ordenes contenidas en el mismo, orden que si está dentro de su resorte competencial, pero que para este caso brillo por su ausencia.
Los abogados de palacio deberían despreocuparse por el descenso vertiginoso de su jefe en las encuestas o por permear aún más con mermelada la sucia política nacional, y dedicarse a estudiar antes de autorizar las nefastas intervenciones Juanma y no ridiculizar más nuestra ya desprestigiada profesión.


lunes, 21 de abril de 2014

DESPERSONALIZAR EL DEBATE, RETO PARA LA DEMOCRACIA


Flaco favor a la democracia le hace la polarización que se enquista fuertemente en la realidad nacional, fortalecida en estos días por los enfrentamientos y acusaciones personales entre los “eruditos” de la política criolla, basando sus incriminaciones en aspectos netamente subjetivos, gobernados por la vanidad y el protagonismo propio de los gamonales ventijulieros tan pasados de moda, y que dejan de lado lo que otrora era el insumo esencial del debate electoral, las propuestas y la elocuencia del candidato.
Muy lamentable resultan las escenas grotescas cubiertas de fina verborrea entre los miembros del aquelarre presidencial y su antiguo jefe el expresidente Uribe, carentes desde cualquier óptica de los fundamentos reales del debate político (respecto de lo cual cabe preguntarnos ¿Por qué hicieron parte activa del anterior gobierno si era tan malo?); nutrido y alentado, eso sí, por el amarillismo de los medios de comunicación, reflejo vivo de la carente, por no decir inexistente, responsabilidad social y profesionalismo en el ejercicio de su función, pues no en vano sus diarias emisiones y tirajes en nada promocionan las propuestas estructurales que propendan por superar los problemas de la nación o en nada estimulan el debate abierto y sin guiones de los aspirantes presidenciales, construyendo de esta forma una visión miope de lo que en realidad significa la elección presidencial, movidos únicamente por el lucro que la publicidad de sus patrañas genera.   
Ni que hablar del vergonzoso papel que están desarrollando los partidos políticos, quienes por antonomasia fungían como vasos comunicantes entre gobernantes y gobernados, convertidos ahora, consecuencia de la diabetes que trajo la “mermelada” presidencial, en fragmentos carentes de representación cuya ideología se diluyo de forma lenta e imperceptible ante la mirada cómplice de sus directivos, los cuales utilizan sus banderas como plataforma que permita, al mejor estilo de Judas Iscariote, anteponer sus intereses particulares sobre los generales. Esta carente ideología les impide tomar partido en forma responsable en los asuntos nacionales, despersonalizando las discusiones prelectorales y eliminando de tajo el asomo de peligrosos caudillos que con sus cantos de sirena conquistan un electorado cada vez más desencantado por la avaricia del político de turno y cada vez más confundido con la información parcializada que recibe de los comunicadores.
Despersonalicemos el debate, el candidato debe convertirse en la cabeza visible de un conglomerado organizado que se identifica no con la persona, sino con la ideología que representa, extirpemos los santistas, los uribistas, los peñalosistas o los petristas, y que florezcan los liberales, los conservadores, los progresistas, en fin, que germinen los partidos políticos con ideologías identificadas y claras, que impidan de forma directa los enfrentamientos subjetivos entre los protagonistas políticos de momento, otorgándonos a nosotros los electores de a pie las herramientas necesarias para votar, al mejor estilo de las democracias robustas y responsables, por un partido y no por un candidato; eliminando de paso de la escena nacional personajillos nefastos, que revolotean de partido en partido que despotrican de su anterior jefe y adulan la ineptitud del actual, en busca de la sombra protectora de la burocracia y el dulce néctar de la mermelada gubernamental. 


Nota marginal: Reconocimiento especial a mis amigos Diego Chacón y Rafael Carillo, cerebros fugados, que con la humildad y abnegación de los filántropos de forma permanente realizan aportes al desarrollo de la humanidad, marginales a los reconocimientos y halagos de la vacía sociedad.    

martes, 15 de abril de 2014

CÚCUTA, LA AMANTE NO AMADA


Sentimientos de impotencia, rabia, tristeza y desanimo, embargan mis pensamientos desde el pasado “viernes negro” 11 de abril de 2014, día en el cual con la parafernalia típica de los ineptos y acompañado de su aquelarre presidencial, se anunciaron ante los medios de comunicación las “medidas” de choque que el gobierno nacional presentaba para la ciudad.
Limosna sin planificación que en nada coadyuva la salida a una profunda y estructurada crisis socioeconómica, que al pasar de los días no solo se consolidada, sino que también carcome los bolsillos de los ciudadanos, y sin compasión alguna corroe los principios estructurales de toda la sociedad, no en vano hacemos parte del vergonzoso ranking de las 50 ciudades más violentas del mundo. Todo esto ante las miradas inactivas, complacientes y cómplices de nuestros “dirigentes” políticos y gremiales, asistentes al sainete convocado por el desprestigiado y reeleccionista Palacio de Nariño y en el cual su visión servil, limitada por el individualismo, solo les permitía aprobar el monologo perfectamente redactado por el telepronter estatal.
Medidas impactantes que afronten en debida forma la crisis, verdaderos incentivos que motiven la constitución de paliativos estructurales, brillaron por su ausencia; no se escuchó debatir por ejemplo sobre la exención del impuesto de renta y complementarios por un periodo a las empresas o personas jurídicas (nuevas y existentes) que se constituyan y localicen físicamente en la jurisdicción del municipio, exención que podría extenderse a los socios, accionistas, afiliados, partícipes y similares por los ingresos que a título de dividendo, participaciones, excedentes, utilidades, reciban de las mismas; ni por equivocación se habló de la devolución o compensación del impuesto a las ventas pagado en importaciones o adquisiciones que realicen las personas jurídicas nuevas de bienes de capital, para ser instalados o utilizados como activos fijos de una actividad productora; ni mucho menos apareció en escena un posible cambio en la utilización del impuesto a las operaciones financieras (4x1.000) para la zona de frontera con la intención de financiar los gastos ocasionados por las medidas que se adopten para la rehabilitación y desarrollo de la misma. No, simplemente nos limitamos a recibir la limosna gubernamental, sin ruborizarnos en lo más mínimo.
De ser la cuna de la vida Republicana de la nación (constitución de 1821) y la tan clamada frontera terrestre más activa del continente, pasamos a convertirnos en la concubina enamorada cuyas muestras de afecto de su amante rayan permanentemente en limosna sentimental, reflejo del miserable lugarque ocupa en su corazón y que no es percibido por aquella debido a que las vendas del amor que le profesa cubren por completo sus ojos. En qué momento la esencia del “dirigente” coterráneo –empresarial y político- se convirtió en un ave rapaz, capaz de recibir y soportar toda clase humillaciones con tal de poder robustecer y fortalecer ostensiblemente su peculio, a costa de la decadencia de su terruño y el de sus paisanos.
En qué momento nos convirtieron en la amante no amada.



viernes, 11 de abril de 2014

MÁS PAPISTAS QUE EL PAPA


Multitudinarias reacciones ha suscitado un no muy afortunado escrito por estos días en las redes sociales titulado “el cucuteño promedio”, razón que me llevo a releer un par de veces la posición de la autora con el fin de tomar partido en la mencionada disquisición.
Inicie por buscar como definía la Real Academia Española de la lengua la palabra promedio, respecto de lo cual encontré que la entendía como el Punto en que algo se divide por mitad o casi por la mitad”, es decir, el título del mencionado escrito está haciendo referencia no a toda la población de la ciudad sino a una porción importante de la misma; punto de partida trascendental toda vez que las fronteras de la ciudad no precisamente se erigen en la Rivera, Caobos, Barrio Blanco o en el club Tennis.
San José de Cúcuta, es una ciudad compuesta por 10 comunas y 9 corregimientos  rurales, con algo más de 600 barrios, sin contar los asentamientos ilegales, que nacen permanentemente ante la complacencia ineficiente de las administraciones de turno, donde pulula el gran porcentaje del deshonroso 72% de informalidad y el 18% aproximado de desempleo; lugares que dicho sea de paso, ni siquiera creemos que existen. Esto me lleva a arribar a una primera conclusión con relación al artículo, y es que sus más acérrimos contradictores provenimos de un sector privilegiado y excepcional de la ciudad, que por múltiples situaciones no hacemos parte de esos nefastos porcentajes referenciados, realidades que obligatoriamente nos conllevan a ser excluidos de tajo del promedio de la población de Cúcuta.
Rasgarse las vestiduras por la referencia directa a los “comerciantes” de la ciudad; o por la familia en chevette o Runner que todos los domingos va de paseo al rio Zulia;  o por no saber los nombres de los parques; o por decir que se detiene cualquier actividad que se esté haciendo por explicar una dirección a un desorientado; o por brindar cuando tiene plata, así se quede limpio; o por sentirse millonario en Venezuela al cambiar unos pocos pesos al insignificante bolívar; es egoísta, cortoplacista y miope de nuestra parte, ya que la crítica no debe ser para una ciudadana cuya frustración por lo que está afrontando la ciudad es evidente, sino para nosotros mismos, la porción privilegiada de la ciudad, la cual en gran porcentaje es la culpable de la situación actual. Reitero lo que exprese hace un par de días, esta ciudad esta acéfala de profesionales y dirigentes competentes, la fuga de cerebros es el común denominador, consecuencia en gran parte de los paupérrimos salarios en la empresa privada, que dejan como única salida el sector público, el mismo que maneja los destinos de la ciudad y al cual se arriba no precisamente por los méritos y la preparación.
¡¡¡Dejemos la doble moral, dejemos de ser más papistas que el papa¡¡¡ ocupémonos de los problemas estructurales de la ciudad, los cuales no serán solucionados a través de Facebook, instagram o twitter, medios en los cuales expresamos lo orgullosos que nos sentimos de ser cucuteños, únicamente a través de un “me gusta”, una foto retocada o una frase filosófica; participemos activamente en los asuntos de la ciudad, realicemos control a las inversiones y obras mediante veedurías, castiguemos socialmente a los corruptos y ladrones de cuello blanco que se pavonean cada fin de semana como “doctores” con su séquito de aduladores, extirpemos el egoísmo e individualismo cancerígeno de ver nuestros bolsillos atiborrados de recursos, sin importar a quien pisoteo o perjudico, construyamos al mejor estilo paisa una “logia” de coterráneos en las empresas o instituciones donde trabajemos, en suma, ayudémonos y ayudemos, no con palabras sino con hechos, al desarrollo socioeconómico de nuestra patria chica.
Convirtámonos de esta forma realmente en el cucuteño promedio, en la regla y no la excepción de la sociedad, y que los debates que se susciten en el futuro, no sea el de la crucifixión o no de una ciudadana cuya frustración para con la ciudad se evidencia a flor de piel.